Son uno de los métodos terapéuticos de la Medicina Tradicional China. Consiste en aplicar ventosas sobre determinados puntos de acupuntura del cuerpo con la finalidad de provocar estímulos cutáneos mediante la producción del vacío.
Las ventosas tradicionales pueden ser de cristal, de bambú, de cerámica o de arcilla. Las ventosas modernas pueden ser de plástico con bomba de aspiración, con pera de goma o magnéticas.
Normalmente las ventosas se colocan en la espalda y se dejan sobre la piel unos 5 minutos al acabar el tratamiento de acupuntura. También se pueden hacer otras técnicas de quitar y poner rápidamente las ventosas, o ponerla y desplazarla por la gracias a una crema o vaselina lubricante.
Ayuda movilizado la sangre y las toxinas han aflorado a flor de piel.
Ayuda en el estancamiento en el cuerpo y abre los meridianos, para que el Qi puede fluir libremente. Por otro lado, también ayuda a rejuvenecer ciertos meridianos y órganos que no están funcionando en su mejor momento. Desde un punto de vista científico, aplicación de ventosas que se conoce para ayudar a activar el sistema linfático, la circulación sanguínea, y es bueno para la reparación de los tejidos profundos.